Cinco kilómetros separan la antigua fábrica Massó de la playa de Liméns, en el concello de Cangas. La ruta no tiene gran dificultad, se hace fácilmente en una hora (dos si se tiene en cuenta la vuelta) y si la haces con calor la recompensa del baño en el mar al llegar a la playa ¡es lo mejor! Es una caminata perfecta para hacer en familia o incluso en bici.

Otra opción si quieres pasar la noche por la zona es hacer el camino al revés: aparcar tu caravana en el camping de Liméns y recorrer la costa a pie para disfrutar de las vistas.

La Senda litoral Massó – Limens comienza en la abandonada Massó, una antigua fábrica conservera y ballenera situada en el Paseo Marítimo do Salgueirón. Para empezar la ruta desde aquí te recomendamos que aparques tu autocaravana en el puerto de Cangas, que está a escasos minutos andando del inicio de la ruta.

La fábrica fue inaugurada en 1942 y fue una de las más avanzadas de su tiempo, por su tecnología y también por sus pioneros servicios sociales a sus trabajadores, como guardería, zonas de comedor o viviendas. Tras contemplar el imponente edificio, la caminata se inicia con el mar a nuestra izquierda, sin perderlo de vista en ningún momento. 

La siguiente parada es la laguna de A Cogorza. La encontramos a mano derecha tan solo a un kilómetro de la fábrica, unos 12 minutos después de empezar el camino, junto a la playa Ribeira do medio. En su entorno están catalogadas unas 400 especies de animales y plantas, desde reptiles y anfibios, hasta mamíferos y aves. A toda esta área, que forma un pequeño cabo, se le conoce como Punta Balea.

La siguiente parada, a tan solo un par de minutos de la laguna, es el arenal de Areamilla, de apenas 200 metros de longitud y aguas tranquilas. 

A los dos kilómetros de ruta, encontramos un par de bancos y el mirador do Anguieiro. Desde este punto se contemplan las islas Cíes al completo y la pequeña cala que da nombre al mirador. 

Casi en la meta, aparece la playa de Santa Marta, separada de manera natural de la de Liméns por unas grandes rocas. Atravesando el arenal o siguiendo el sendero que la bordea, la ruta finaliza en el complejo dunar de Liméns. La playa cuenta con 310 metros de enorme belleza y unas dunas de hasta 8,7 hectáreas con pasarelas de madera sobre ellas. Es habitual encontrar a bañistas que suben a refugiarse del sol bajo los pinos, sobre todo a la hora de comer.

Puedes terminar aquí tu ruta o llegar a las playas de Nerga, Viñó y Barra (estas dos últimas nudistas) y enlazar con la ruta de los faros… pero eso ya es cosa de otro post 🙂

Sitios chulos para pernoctar con tu furgo por la zona: Camping de Liméns (con todos los servicios que ofrece un camping pero mejor evitar en temporada alta) o Baixada a Areamilla (tranquilo, cerca de la playa y con chiringuito enfrente)